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Antihistamínico Natural: Pastillas naturales para la alergia
Las alergias son una respuesta del sistema inmunitario ante sustancias que, aunque inofensivas, el cuerpo percibe como una amenaza. Polen, polvo, pelo de animales o ciertos alimentos pueden desatar síntomas como picor, estornudos, ojos llorosos o congestión nasal. En esos momentos, el recurso más común suelen ser las pastillas para la alergia, pero cada vez más personas buscan una opción más respetuosa con su organismo: el antihistamínico natural.
¿Qué es un antihistamínico natural y cómo actúa?
Para entender cómo funciona un antihistamínico natural, primero hay que saber qué es la histamina. Esta sustancia se libera en el cuerpo cuando entra en contacto con un alérgeno y es la responsable de la mayoría de los síntomas molestos: inflamación, picor, estornudos o mucosidad.
Los antihistamínicos farmacológicos, como las típicas pastillas para la alergia, bloquean los receptores de histamina y reducen sus efectos. Sin embargo, muchas veces provocan somnolencia, sequedad en la boca o cansancio, algo que puede interferir con la rutina diaria.
Por eso, cada vez más personas eligen una alternativa natural que ayude al cuerpo a regular su respuesta inmunitaria de forma más suave y sostenible.
Los mejores antihistamínicos naturales
Los antihistamínicos naturales incluyen alimentos como la ortiga, el té verde, el jengibre, la piña y el ajo. Otras opciones son el rooibos, la equinácea, la vitamina C (presente en cítricos y suplementos), y los probióticos (en alimentos fermentados como el yogur). Estos remedios naturales pueden ayudar a reducir los síntomas de las alergias, como la congestión nasal y los estornudos.
Suplementos ortomoleculares: apoyo natural contra las alergias
La nutrición ortomolecular busca equilibrar el cuerpo a través de los nutrientes que necesita para funcionar correctamente. En el caso de las alergias, determinados suplementos naturales actúan como antihistamínicos naturales o como moduladores del sistema inmunitario.
- Quercetina: un flavonoide presente en frutas y verduras que bloquea la liberación de histamina y refuerza las defensas.
- Vitamina C: además de ser antioxidante, reduce los niveles de histamina en sangre.
- Magnesio: ayuda a mantener la función respiratoria y reduce la contracción de los músculos bronquiales.
- Zinc y selenio: apoyan al sistema inmunitario, mejorando la respuesta del organismo frente a alérgenos.
- Omega 3: los ácidos grasos EPA y DHA presentes en el pescado y en suplementos reducen la inflamación y alivian síntomas respiratorios.
En Naturemost encontrarás formulaciones de alta calidad que combinan estos nutrientes de forma equilibrada, ayudando a tu cuerpo a defenderse sin los efectos secundarios de las pastillas para la alergia.
Beneficios principales
- Eficacia sin efectos típicos: menor somnolencia y mareos.
- Acción complementaria: antioxidante e inmunomoduladora.
- Fácil integración diaria: formatos cómodos.
- Compatibles como complemento: siempre con supervisión profesional.
Principales compuestos y sus beneficios
| Componente natural | Efectos principales |
|---|---|
| Vitamina C | Potente antioxidante que ayuda a reducir la histamina y refuerza el sistema inmune. |
| Bioflavonoides cítricos | Potencian la acción de la vitamina C; antioxidantes y antiinflamatorios. |
| Equinácea | Estimula las defensas naturales y modula la respuesta inmunológica. |
| Helichrysum | Propiedades antiinflamatorias y calmantes para vías respiratorias. |
| Scutellaria baicalensis | Acción antioxidante y reguladora frente a reacciones alérgicas. |
| Quercetina | Estabiliza mastocitos y reduce histamina e inflamación. |
| Bromelina | Enzima con acción antiinflamatoria, útil para congestión nasal. |
| Zinc | Favorece la función inmunitaria y la reparación celular. |
| Vitamina B5 | Ayuda a reducir el cansancio y apoya el metabolismo energético. |
| Vitamina A y Betacaroteno | Protegen las mucosas y ayudan a mantenerlas en buen estado frente a irritaciones. |
Seguridad y pautas profesionales
Aunque naturales, estos compuestos pueden interactuar con medicamentos o tener contraindicaciones. Consulta con un profesional sanitario antes de iniciar cualquier suplemento.
Antihistamínicos naturales: una opción alternativa
Optar por un antihistamínico natural no solo es una decisión más saludable, sino también una forma de escuchar a tu cuerpo y darle lo que realmente necesita. Con el apoyo de la nutrición ortomolecular, alimentos funcionales y suplementos naturales, puedes controlar las alergias sin depender constantemente de las pastillas para la alergia.
En Naturemost, te ayudamos a encontrar la fórmula natural que mejor se adapta a ti. Descubre nuestros antihistamínicos naturales y da el paso hacia un bienestar real y duradero.
Preguntas frecuentes sobre Antihistamínicos naturales
No existe un único “mejor” antialérgico natural para todo el mundo. Algunas opciones con evidencia científica moderada son el extracto de butterbur (siempre libre de alcaloides pirrolizidínicos), la quercetina y la ortiga. Además, los lavados nasales con solución salina ayudan a reducir la exposición a alérgenos y aliviar síntomas nasales.
No hay una “mejor pastilla” universal. Los antihistamínicos de segunda generación, como cetirizina, loratadina o fexofenadina, suelen recomendarse por su eficacia y menor somnolencia. La elección depende de tus síntomas y tolerancia, por lo que siempre conviene consultar con un profesional sanitario.
Algunas opciones naturales con respaldo científico son:
- Lavados nasales con solución salina.
- Quercetina (flavonoide con efecto antihistamínico en algunos estudios).
- Ortiga (extractos de hojas).
- Butterbur certificado libre de alcaloides peligrosos (PA-free).
- Vitamina C y espirulina, con evidencia limitada.
Es importante asegurarse de la calidad de los suplementos y consultar a un profesional antes de usarlos, especialmente si tomas otros medicamentos.
Depende del contexto. En general, los antihistamínicos de segunda generación y los corticosteroides nasales son opciones seguras y eficaces cuando se usan según indicación médica. En embarazo o lactancia, consulta siempre con tu profesional sanitario antes de iniciar tratamiento.



